Juliana, con J de Juicio y de Juego de Sir Manoiká
No sé si escribes con tinta o con sangre, pero tus palabras huelen a piel que aún recuerdo. Tienen ese filo suave que no corta— seduce. Tú no escribes: poses. Desnudas las sílabas como quien se desabrocha el alma por el puro gusto de que la vean latir. Hay una guerra en tu boca y paz en tus caderas. Eres esa contradicción que reza con la lengua mientras peca con los muslos. Juliana, con J de juicio y de juego, con lengua de volcán y manos de iglesia. Te leí… y ahora tengo las rodillas débiles y el deseo de volverme libro solo para que me abras en tu página más íntima. No hay metáfora que te contenga: ni agua, ni luna, ni selva. Eres verbo en carne viva. Y yo, un lector sin salvación, leyéndote con los ojos cerrados y el alma abierta. Pd: Me duele pensar que eres mi ex. Juliana, con J de Juicio y de Juego Latidos Sir Manoiká.