Yo no sé de poesía por Sir Manoiká
Yo no sé de poesía.
No estudié métricas, ni hablo en endecasílabos.
No domino los nombres ilustres,
ni tengo libros con mi nombre en letras doradas.
Pero a veces
mi pecho se rompe sin ruido
y algo adentro
me obliga a escribir.
Como quien sangra para no explotar.
A mí la poesía me encontró
una noche sin nombre,
cuando el mundo dolía más de lo que podía decirse
y el silencio me quedaba chico.
Desde entonces, escribo.
No para lucirme.
Escribo para no morirme del todo.
Yo no sé si esto que hago es poesía,
pero sé que en cada verso
hay un pedazo de mí que ya no vuelve.
Mi infancia, mis miedos,
las veces que amé y no me amaron,
mi padre cuando callaba demasiado,
mi madre cuando lloraba sin saber que yo la oía.
A veces escribo con rabia.
Otras, con ternura.
Y a menudo, con un nudo en la garganta
que nadie ve.
Escribo porque no sé rezar,
pero esto me sirve igual.
Porque a veces Dios no contesta
pero un poema sí.
La poesía, si me preguntas,
es ese lugar donde puedo llorar
sin que me pregunten por qué.
Es dejar que la herida hable
y que el dolor no tenga que disfrazarse.
No soy poeta.
Soy solo un hombre
que escucha a su alma cuando grita.
Y si esto no es poesía,
entonces no sé qué es.
Pero me ha salvado la vida
más veces de las que puedo contar.
Y si alguien allá afuera,
al leerme,
siente que no está solo,
entonces quizás,
solo quizás,
estoy escribiendo poesía sin querer.
Yo no sé de poesía
—Sir Manoiká—
Comentarios
Publicar un comentario